En el mundo de la fotografía de bodas, las tendencias evolucionan constantemente, ya que cada pareja busca capturar su día especial de manera única y auténtica. A lo largo de los últimos años, los fotógrafos han adaptado su estilo a las preferencias cambiantes de los novios, ofreciendo técnicas innovadoras que transforman los álbumes en verdaderas obras de arte. La era de las fotos tradicionales ha dado paso a una variedad de enfoques creativos, lo que ha revolucionado la forma en que se recuerdan los momentos más importantes.
Documental
Una de las principales que está ganando popularidad es el estilo documental o periodístico. Este enfoque se caracteriza por capturar momentos espontáneos y reales, en lugar de fotos posadas. Los fotógrafos adoptan una actitud más discreta, mezclándose entre los invitados y registrando la celebración tal como ocurre, sin intervenir. Este estilo permite que las emociones fluyan naturalmente, y las imágenes resultantes tienden a ser sinceras y emotivas, reflejando verdaderamente la esencia de la pareja y el ambiente del evento. Es una técnica que resalta lo auténtico, los gestos pequeños pero significativos, como las sonrisas, las lágrimas y las miradas cómplices.
Exteriores
Otra preferencia clave es hacer tomas en exteriores, aprovechando la belleza de la naturaleza. Cada vez más parejas optan por escenarios al aire libre, como playas, montañas, bosques o jardines, para celebrar su unión. La luz natural ofrece una gran ventaja, ya que proporciona una iluminación suave y envolvente que resulta ideal para capturar imágenes llenas de vida y color. Los atardeceres y amaneceres se han convertido en momentos icónicos para las sesiones de fotos, generando imágenes espectaculares con fondos que parecen salidos de cuentos de hadas. Además, este tipo permite jugar con elementos del paisaje, como el viento, el agua o los árboles, integrándolos para crear una atmósfera mágica.
Uso de drones
El uso de drones es otra tendencia en ascenso. Estas tomas aéreas permiten obtener perspectivas innovadoras, capturando la totalidad del lugar donde se realiza o incluso a los invitados desde las alturas. Las imágenes obtenidas con drones pueden incluir desde panorámicas espectaculares del paisaje hasta planos cercanos que añaden un dinamismo único. Los fotógrafos están utilizando esta tecnología no solo para inmortalizar la ceremonia o la recepción, sino también para documentar el lugar en su totalidad, proporcionando recuerdos visuales que antes no eran posibles.
Edición minimalista
En cuanto a la edición de las fotografías, cada vez más parejas optan por un estilo minimalista y atemporal. Aunque las ediciones con filtros vintage o altamente saturados fueron predilecciones en años anteriores, hoy en día se prefiere un acabado más limpio, con colores naturales y tonos suaves que resistan el paso del tiempo. Este estilo realza la belleza auténtica y de los momentos capturados, evitando que las fotos parezcan artificiales o sobrecargadas de efectos. Se trata de una estética que busca la elegancia en la simplicidad, permitiendo que las emociones hablen por sí solas a través de las imágenes.
Personalización
Por otro lado, la personalización de los álbumes está cobrando gran relevancia. Cada pareja quiere que sea un reflejo de su historia, por lo que los profesionales ofrecen opciones personalizadas, desde la selección de los materiales hasta el diseño de las páginas. Algunos novios eligen contar su historia cronológicamente, mientras que otros prefieren que el álbum siga una narrativa emocional, enfocándose en los momentos más significativos para ellos. Algunos también están incluyendo detalles adicionales, como cartas manuscritas, textos breves que expliquen ciertos momentos o pequeñas notas de los novios, lo que convierte al álbum en una pieza más íntima y personal.
Pre y post ceremonia
Finalmente, no se puede dejar de mencionar las sesiones preboda y postboda. Estas sesiones adicionales permiten a los novios tomarse el tiempo para relajarse y disfrutar del proceso fotográfico sin presión. Las sesiones suelen ser más informales y se enfocan en capturar la esencia de los contrayentes antes de su gran día, mientras que las postboda permiten revivir la magia con fotos adicionales en un entorno más relajado, sin preocuparse por los tiempos ajustados del evento.
“Estas sesiones no sólo capturan la emoción y la conexión que comparten como pareja, sino que también los preparan para el gran día, asegurando que se sientan cómodos y relajados frente a la cámara”, comenta Marlén Fueyo.
La fotografía de bodas ha experimentado una transformación significativa en los últimos años, adaptándose a las nuevas tecnologías y preferencias de las parejas modernas. Desde la espontaneidad del estilo documental hasta las tomas aéreas con drones, las tendencias actuales ofrecen una amplia gama de opciones para capturar ese día tan especial de manera única y memorable. Al final, lo más importante es que estas fotos reflejen el amor y la felicidad compartida, recordando que cada casamiento es un evento irrepetible, lleno de momentos que perdurarán para siempre.