A veces somos un poco pesados con la dieta, no sólo porque una buena alimentación es el principio básico para estar en forma, sino porque es esencial para la salud y, atentos, para nuestra belleza. Nuestra piel es un claro reflejo de ello, ya que sus defensas frente a las agresiones externas constantes y su nutrición e hidratación para combatir manchas, marcas y envejecimiento en general depende de lo que comemos. Las vitaminas y el agua que necesita para mantenerse bella (hidratada, joven, luminosa, elástica y fuerte) se hallan sobre todo en frutas y verduras y, lo mejor, es que este primer grupo puede comerse sin cocinar en cualquier lugar y momento. De ahí que hoy os traigamos 5 frutas que debéis empezar a amar porque cuidarán vuestra piel desde dentro.
- Plátanos
los plátanos son geniales aliados de nuestra belleza y nutrición, nos dan mucha energía y vitaminas, en concreto A, B y E, además de potasio, magnesio y hierro, lo que las hacen unos poderosos agentes antiedad.
La única pega es que son bastante calóricos, con lo que en caso de dieta no hay que pasarse a base de plátanos o bananas. Un consejo es que los comáis siempre maduros, ya que si están duros pueden ser algo astringentes y ser un problema para quienes sufren estreñimiento. Si están blanditos asimilaremos mejor su gran aporte de fibra y hará el efecto contrario: ayudar a eliminar toxinas. Una idea genial y muy potente para mimar la piel y empezar bien en día es tomarlos con avena, miel y un poco de leche (de vaca o vegetal) como desayuno. También podéis usarlos como mascarilla aplastados con un tenedor y una cucharada de la misma miel de antes.
- Limón y Naranja
La vitamina C es otro de los ingredientes de toda juventud natural. Los cítricos, además, son ricos en antioxidantes lo que ayuda a luchar contra los radicales libres. La cantidad de agua y lo aludido ya, presente en naranjas y limones, ayudan a mantener el nivel de agua de la piel y es muy depurativo. Beber zumo de limón templado o caliente ayuda a una piel limpia y luminosa, además de ayudar a las digestiones y a eliminar la congestión de resfriados de la odiosa alergia primaveral. Si sois capaces de tomar un vaso en ayunas su efecto será aún más desintoxicante.
La naranja, por su parte, además ayuda a mejorar la textura de la piel. Tanto esta como el limón sirven para luchar contra la celulitis y el acné: podéis usar como exfoliante el jugo con una cucharada de azúcar o la ralladura seca para frotar las zonas problemáticas.
- Manzanas
Las manzanas tienen también propiedades antioxidantes gracias a su contenido en vitamina C, limpiadoras debido a su ácido málico y tartárico, que ayudan a eliminar las células muertas de la superficie con un efecto exfoliante, hidratante y reactivador de la circulación. Además tiene mucha fibra (sobre todo si la comes con su piel) lo que ayuda a la depuración general del organismo y a reducir el colesterol.
No sólo es bueno comerla, puedes usarla de forma tópica: el zumo de manzana como base de una mascarilla con otros ingredientes naturales o usar vinagre de manzana, si es posible orgánico, como tónico facial. Una mascarilla de pure de una manzana entera, con una cucharada de piel ayuda a disolver grasa, regular el sebo y puntos negros, con una de yogur, limón y miel regula el ph, calma y cierra poros y sin nada aporta luminosidad. Si se enfría en la nevera o congelador, esta masa desnuda se puede emplear también para aliviar quemaduras y reducir ojeras.
- Papaya
La papaya es un hallazgo tropical: no sólo depura ayuda a regenerar tejido y a una cicatrización rápida. Así tanto si tienes problemas de tez débil o de un estómago sensible, con tendencia a digestiones difíciles, ulceras o reflujo, empieza a tomar papaya o papayón a diario. También ayuda a limpiar poros, regula grasa, exfolia, suaviza los talones... sólo tienes que añadir una cucharada de yogur, de miel de abejas o de azúcar moreno y tendrás una mascarilla de lujo. Más rápido: en smoohie sola o con naranja, la papaya está deliciosa.
Todo esto se explica por sus dosis de vitaminas del grupo B, vitamina C, carotenos, flavonoides, potasio, magnesio y fibra y su inigualable papaína, una enzima casi mágica que tiene cualidades analgésicas increíbles (para lesiones músculares y reumas), digestivas y depurativas, entre otras.
Imágenes| antpkr